Agresiones Sexuales siglos XV al XVIII en la Cuadrilla de Añana (Araba/Alava)

Temas de hoy en día en la Cuadrilla de Añana durante los siglos XV al XVIII.

Continuo la serie de artículos sobre qué temas están de actualidad hoy en día y que afectaban a nuestros antepasados en los pueblos de la Cuadrilla de Añana durante los siglos XV al XVIII.

Vamos a conocerlos. No serán exactamente igual a como los vivimos hoy, pero sí perfectamente asimilables.

Voy a citar nombres de personas y pueblos donde ocurrieron los hechos, pero, por favor, que nadie tenga la ocurrencia, pensamiento, de relacionarlos con personas que con esos apellidos viven en esos mismos pueblos en la actualidad, ya que tiene un cien por cien de posibilidades de equivocarse, ya que entonces los apellidos era pocos y muy comunes.

TEMA DE HOY: AGRESIONES SEXUALES

Llevamos más de un año asistiendo a un esperpéntico juicio por una violación grupal a una mujer durante las fiestas de San Fermín del año pasado por un grupo que se denominaba asimismo como “la manada”.

Es lo que me lleva a rescatar de la memoria de nuestros pueblos las agresiones sexuales que también sufrieron las mujeres de nuestra Cuadrilla.

Una forma habitual de agresión sexual en esos siglos era el estupro. Para ello acudimos a la definición que nos da el Diccionario de la Real Academia de la Lengua

Estupro:

1. m. Der. Coito con persona mayor de 12 años y menor de 18, prevaliéndose de superioridad, originada por cualquier relación o situación.

2. m. Der. Acceso carnal con persona mayor de 12 años y menor de 16, conseguido con engaño.

3. m. Der. Por equiparación legal, algún caso de incesto.

4. m. Antiguamente, coito con soltera núbil o con viuda, logrado sin su libre consentimiento.

Es esta última definición el contexto que le debemos dar a la mayor parte de los casos que hoy os presento. Quiero destacar que la definición es bien clara “coito logrado sin libre consentimiento”.

En el año 1593, encuentro el caso más antiguo. Se trata de la ejecutoria del pleito litigado por Catalina de la Estrada, vecina de Quejo (Álava), contra Pedro de Pinedo, vecino de dicho lugar, sobre estupro.

En 1632, tenemos la Ejecutoria del pleito litigado por Martín de Palacio y María de Palacios, su hija, vecinos de Bóveda (Álava) contra Alonso de Quintanilla, vecino del lugar de Corro (Álava), sobre estupro y alimentos para la criatura.

El coito consumado con una menor de edad ya que la representa su padre, dio lugar a un embarazo y posterior nacimiento de una criatura, para la quien se solicita una pensión alimenticia. ¿Nos suena a hoy en día?

En 1690 hallamos la Causa de oficio instruida para averiguar quién es el causante del embarazo de Antonia Ortiz de la Puente, vecina de Arreo. Nombramiento de Pedro Angulo, vecino de Arreo, tío de la mencionada Antonia, como curador ad litem de su persona, el 16 de diciembre de 1690.  Confesión del 20 de diciembre de 1690, en la que Antonia declara que el causante de su embarazo es José de Montoya, vecino de Turiso.

Se muestra la preocupación que había entonces también por encontrar a los culpables y que se hicieran cargo de los hijos tenidos de esa forma. Este caso también es grave pues Antonia era menor de edad, huérfana, y tenía su tío como “curador ad litem”, que se llama así al que es nombrado en un juicio sucesorio para defender a los menores de edad con derecho sobre los bienes del difunto.

En 1714, encontramos otro caso similar como es la Causa criminal de oficio instruida para averiguar a quien corresponde la paternidad de la hija de María Cruz de Montoya, vecina de Salcedo, que murió en el parto.

Importante saber quién era el padre de la criatura para que éste hiciese cargo de su vástago al haber muerto su madre en el parto.

Otro caso parecido, lo hallamos en 1716, Causa de oficio instruida para averiguar quién es el causante del embarazo de Felipa de Carro, viuda y vecina de Comunión.

Este caso fue de escándalo moral entre la población de Comunión y sus alrededores, ya que se trataba de una viuda, al igual que el sucedido en 1731, por la Causa de oficio instruida para averiguar quién es el causante del embarazo de Manuela Ruiz de Loizaga, natural y residente en Molinilla o también el acaecido en Fontecha en el año 1782, Causa de oficio instruida debido al embarazo de Manuela Ortiz de Zárate, natural y residente en Fontecha; y nuevamente en el pueblo de Molinilla en  1786 está la Causa de oficio instruida para averiguar al causante del embarazo de María Ruiz de Loizaga, menor. Actúa como juez: Antonio de la Puente, teniente de alcalde mayor y juez ordinario de Ribera Alta.

También encontramos los típicos abusos sexuales de los señores con las criadas. Así en 1728, Pleito de María de la Presa, natural de Villamaderne, en el valle de Valdegovia, contra Antonio Félix de Arza, vecino de Murga, y juez de la tierra de Ayala, por haberla estuprado cuando prestaba servicio en su casa como criada, dejándola embarazada y obligándola a negarlo porque se iba a casar con su convecina María Santos de Larra. Y también en 1789 hallamos el Pleito de Miguel Díaz de Tuesta, vecino de Rivabellosa, contra Vicente Fernández, labrador y vecino de Dordóniz, por haber estuprado a su hija Marcelina de Tuesta, cuando prestaba servicio en casa de Manuel Fernández, presbítero beneficiado de Dordóniz y tío del acusado, dejándola embarazada. Ya veis que ni en casa de los curas se respetaba a las mujeres que se ganaban la vida realizando tareas domésticas para otros.

Y ahora os relato un par de casos en el que se cumple la infausta y desafortunada frase “de prometer hasta meter, y una vez metido olvidarse de lo prometido”.

Año de 1774, Causa criminal por querella de Petronila de Montoya, natural de Tuyo y residente en Antezana de la Ribera, contra José Rodríguez, su convecino, por haberla dejado embarazada bajo palabra de matrimonio y negarse ahora a casarse.

Y en 1785, Pleito de Ildefonso Martínez, vecino de Corro, en el valle de Valdegovía, contra Manuel Vadillo, vecino de Bóveda, en el mismo valle, por haber estuprado a su hija Casilda Martínez, incumpliendo además su palabra de matrimonio y no reconociendo el niño que tuvo.

También encontramos un caso anecdótico de una persona que se declara inocente de un embarazo. En aquel tiempo no había test de ADN que demostraran la paternidad. Además, se da el caso que lo hace un hermano suyo en su nombre y representación por hallarse el supuesto padre en prisión. Es el año de 1776, “Petición de Juan José González, vecino de la villa de Ollávarre, en nombre de su hermano, el cual se encuentra preso, por la cual se declara inocente del embarazo de Martina González."

También podemos encontrar casos de incesto, relación sexual entre familiares consanguíneos muy cercanos o que proceden por su nacimiento de un tronco común. En nuestras sociedades, el incesto y la poligamia son duramente condenados tanto por la ley como por la moral. como el que se desarrolla entre 1672/1673, "Pleito de Francisco Mendoza Alcalde Ordinario de la hermandad de la Ribera, contra Andrés Ruiz de Loizaga, casado, vecino del lugar de Antezana de la Ribera jurisdicción de dicha hermandad y Ana Ortiz de Landazuri, su prima carnal, soltera, natural del lugar de Teresa (Por error de Tuesta) en el valle de Valdegovia (Álava). y con Andrés Ortiz de Landazuri, padre de Ana, que al pleito salió en instancia de apelación sobre Acusarles de incesto y amancebamiento"

Y por supuesto desgraciadamente casos de violación pura y dura, como el incoado el 3 de noviembre de 1727, “Causa criminal por querella de María Josefa Ortiz de Guzmán, vecina de Ollavarre, contra Francisco Ruiz de Lezana, su primo, por violación y posterior embarazo."

Y para terminar ya en los albores del fin del siglo XVII, encontramos una agresión sexual a la que añade rapto. Es el año 1797, Causa de oficio a instancia de Paula González, natural de Madrid, ahora casada con Pedro Pérez Castaño, administrador de la Real Fábrica de Salinas de Villena (Alicante), contra Félix Tabliega, natural de Cerezo de Río Tirón (Burgos), y Nicanor José de Loma y Osorio, natural de Salinas de Añana (Álava) y alcalde mayor en Cerezo de Río Tirón (Burgos), sobre el rapto, deshonra y embarazo bajo palabra de matrimonio del primero.

Este caso es en sí único, ya que vemos como en aquel tiempo una mujer ya casada se atreve a denunciar unos abusos sexuales acaecidos años antes en estado de soltería.

Todos estos casos están extraídos de los archivos de la Real Chancillería de Valladolid y del Archivo Histórico Provincial de Álava, dentro de la unidad Justicia Señorial.

Y de despedida y hasta el siguiente artículo, no puedo más que expresar mis deseos de una Cuadrilla de Añana libre de agresiones sexistas. Y recordemos que EL NO SIGUE SIENDO NO. EZ ETZA BETI DA EZETZ.